Jesse Chacon
Ministro de Relaciones de Interior y Justicia.
Las muertes de Sindoni, de los hermanos Faddoul y de Miguel Rivas, y la del periodista Jorge Aguirre, ocurridas un poco antes de la Semana Santa, y que causaron un gran conmoción en la ciudadanía tienen en común que en todos ellos participaron, de una u otra forma, agentes de policías de los diversos cuerpos que existen en el país para garantizar la seguridad , en estos casos son policías de Aragua, de la Metropolitana o de Chacao. Antes habíamos oído casos similares en Portuguesa, Anzoátegui, Carabobo, Zulia y la municipales de Cabimas y Lagunillas. Son muchos los años que llevamos oyendo de la complicidad o alianza entre cuerpos policiales y el hampa o peor aún, la existencia de bandas integradas por funcionarios activos de policías, GN u otros organismos. Es frecuente observar que funcionarios de policías expulsados de un organismo ingresan a otras policías de otros estados o municipios y también es común en estos cuerpos, una solidaridad automática hacia aquellos funcionarios que han sido señalados como autores de delitos cometidos contra la propiedad o incursos en crímenes o secuestros. No es casual, el miedo que tiene la ciudadanía hacia los cuerpos policiales y no exageramos cuando decimos que la acción policial esta mediatizada por la presencia en esos organismos de individuos con problemas de conducta o cómplices del hampa común.
No podemos contentarnos con decir que este es un problema mundial, generalizado: la infiltración de los cuerpos policiales. Ya tenemos siete años pregonando un nuevo orden y un hombre nuevo, creemos que se han hecho esfuerzos sostenidos para lograr tales objetivos y que en algunos casos pueden observarse avances, pero no basta con eso. Es necesario avanzar hacia la construcción de organismos de seguridad que efectivamente velen por la seguridad y capturen a los delincuentes. En ese sentido es obligatorio pensar en la centralización tanto de los efectivos como de la inteligencia de manera que sucesos como los vividos no se repitan con tanta impunidad.
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